Salmos 55:22: “Echa sobre el Señor tu carga, y Él te sustentará; no dejará para siempre caído al justo.” Este versículo nos enseña la importancia de confiar en Dios y de entregarle nuestras preocupaciones y dificultades. En momentos de angustia o debilidad, el Señor promete ser nuestro apoyo, dándonos la fuerza y el ánimo que necesitamos para seguir adelante.
Cuando decidimos confiar en Dios y le entregamos nuestras cargas, Él nos da su paz y nos recuerda que no estamos solos. Su apoyo es constante y fiel, y no permitirá que sus hijos permanezcan en la aflicción. Este acto de fe nos libera de la ansiedad y nos permite vivir con la certeza de que el Señor nos sostiene.
Este mensaje nos invita a descansar en el amor y la fidelidad de Dios, recordándonos que Él tiene el control y siempre estará dispuesto a ayudarnos. A medida que aprendemos a entregarle nuestras cargas, encontramos la paz y fortaleza para enfrentar cada día con esperanza.
Por: Rafael Santos