El dolor y la indignación se apoderaron de Santiago de los Caballeros este lunes, cuando familiares, amigos y vecinos despidieron a Noelbin JeremÃas Cabrera Rubiera, el adolescente de 14 años que fue asesinado a puñaladas por otro joven al salir del Politécnico en Santiago Oeste. El sepelio, marcado por el llanto desconsolado de sus seres queridos, se convirtió en un grito de justicia en un caso que, según denuncian, ha sido ignorado por las autoridades.
El crimen que conmocionó a la comunidad
El viernes 29 de noviembre de 2025, Noelbin salÃa del politécnico junto a sus compañeros cuando, sin mediar palabras, otro adolescente lo apuñaló tres veces en el pecho, causándole heridas mortales. El agresor, de 16 años, huyó del lugar, dejando a Noelbin desangrándose en la calle, mientras sus amigos, en estado de shock, pedÃan auxilio a gritos.
«No entendemos por qué lo hizo. Noelbin no tenÃa problemas con nadie. Era un niño bueno, que solo querÃa estudiar», relató un compañero de clase.
Noelbin fue trasladado de urgencia al Hospital José MarÃa Cabral y Báez, pero los médicos no pudieron salvarle la vida. Su muerte dejó a su familia destruida y a una comunidad conmocionada.
El dolor de un padre: «Dios, ¿por qué no me llevaste a mà primero?»
El sepelio de Noelbin fue una escena desgarradora. Su padre, José Ariel Cabrera, se derrumbó junto al ataúd de su hijo, gritando entre lágrimas: «Se llevaron un pedazo de mÃ. Mira a mi hijo, cómo lo están enterrando. Dios, ¿por qué eres tan injusto conmigo? ¿Por qué no me llevaste primero a mÃ?».
Su madre, MarÃa Rubiera, no pudo asistir al funeral debido al shock emocional. «Ella no ha podido hablar. Solo llora y repite el nombre de su hijo», contó una tÃa del adolescente.
La indiferencia de las autoridades: «Volver el lunes»
Lo que ha aumentado el dolor de la familia es la falta de respuesta de las autoridades. El sábado 30 de noviembre, los familiares se presentaron en el Palacio de Justicia de Santiago para exigir avances en la investigación, pero se encontraron con una respuesta frÃa: «Volver el lunes, los departamentos están cerrados».
«¿Cómo es posible que no haya nadie que nos atienda? ¡Mi hijo fue asesinado y no hay justicia!», cuestionó José Ariel, quien denunció que no se ha detenido al agresor ni se han tomado declaraciones clave.
El agresor: ¿Un acto de violencia sin motivo?
Hasta ahora, las autoridades no han revelado la identidad del agresor, un joven de 16 años que, según testigos, no tenÃa una relación previa de conflicto con Noelbin. Esto ha generado teorÃas y especulaciones:
- Violencia aleatoria: Algunos creen que fue un acto impulsivo.
- Conflicto no reportado: Otros sugieren que pudo haber habido un altercado previo.
- Venganza por terceros: También se maneja la hipótesis de que el agresor actuó en representación de alguien más.
«Noelbin no tenÃa enemigos. Era un niño tranquilo, que solo querÃa estudiar y ayudar en su casa», dijo una vecina.
La comunidad exige justicia
La muerte de Noelbin ha conmocionado a Santiago Oeste, donde los vecinos exigen justicia y medidas para prevenir más violencia. «Esto no puede quedar impune», advirtió Rafael Pérez, un lÃder comunitario.
En el politécnico donde estudiaba Noelbin, sus compañeros y profesores han organizado velorias y actos simbólicos en su memoria.
El sistema judicial bajo la lupa
El caso de Noelbin ha reavivado las crÃticas al sistema judicial dominicano, acusado de lentitud y falta de sensibilidad. «Es inaceptable que una familia que acaba de perder a un hijo tenga que esperar dÃas para que le den atención», declaró Juan Méndez, un abogado de derechos humanos.
¿Qué sigue? La familia no descansará
Mientras la familia de Noelbin llora su pérdida, el agresor sigue en libertad. «No vamos a descansar hasta que haya justicia», juró José Ariel.
Un llamado a la reflexión
El asesinato de Noelbin ha reabierto el debate sobre la violencia juvenil en República Dominicana. «Este no es solo un caso de un crimen, es un reflejo de una sociedad que no está dando oportunidades a sus jóvenes», señaló Laura Hernández, una psicóloga.
El último adiós: Entre lágrimas y promesas de lucha
El sepelio de Noelbin fue un acto cargado de emoción. Su padre prometió que no descansará hasta ver justicia.