La presidenta de Georgia, Salomé Zurabishvili, cuyo mandato expira el próximo 29 de diciembre, corre el riesgo de violar el Código Penal e ir a la cárcel si convoca nuevas elecciones o se niega a salir de la sede oficial después de esa fecha, advirtió este domingo el primer ministro del país, Irakli Kobajidze.
«Estoy seguro de que prevalecerá en ella el sentido común para no violar las normativas del Código Penal», dijo el jefe del Gobierno, pues —dijo— «nadie quiere meter a una mujer de 72 años en prisión». Asimismo, advirtió que dicha conducta «expondría a todos quienes estén con ella en la sede presidencial dentro de este guion». «Todas las exigencias de nuevas elecciones son ridículas», agregó Kobajidze.
El pasado 14 de diciembre, un colegio electoral formado por 300 diputados y representantes locales electos, eligió al exfutbolista Mijaíl Kavelashvili, representante del partido gobernante Sueño Georgiano, para ejercer el cargo de presidente durante los próximos cinco años. Para el 29 de diciembre está programada la investidura de este primer presidente georgiano no elegido por voto popular directo.