
Rapidus Corporation, fundada en 2022 por gigantes como Sony, Toyota, NEC, SoftBank, Kioxia, Denso, Nippon Telegraph y MUFG Bank, está a punto de iniciar una línea piloto de chips de 2 nm. Esta iniciativa es parte del esfuerzo de Japón por recuperar su competitividad en la industria de semiconductores.
El Gobierno japonés, liderado por Shigeru Ishiba, ha destinado una inyección de 5.400 millones de dólares específicamente para Rapidus. Esta empresa, aunque joven, cuenta con el respaldo de algunas de las compañías más relevantes en tecnología, automoción y telecomunicaciones.
Rapidus planea comenzar las pruebas de fabricación de chips avanzados en su planta de Chitose, Hokkaido, en abril. La meta es iniciar la producción a gran escala de semiconductores de 2 nm para 2027, compitiendo directamente con líderes del sector como TSMC, Intel y Samsung.
La fábrica de Rapidus se destacará por su automatización completa, utilizando robots y tecnología de inteligencia artificial para producir chips de manera más rápida, económica y con mayor calidad. Este enfoque podría revolucionar la industria de los semiconductores.