
La República Dominicana fue la estrella indiscutible de la Cabalgata de la Hispanidad 2025 en Madrid, con un desfile que combinó tradición, música y orgullo caribeño en un espectáculo que recorrió desde la Plaza de España hasta Cibeles. Una delegación de 140 dominicanos presentó una muestra vibrante del Carnaval Dominicano, con personajes icónicos como Los Diablos Cojuelos, las Guloyas, Roba la Gallina y el Lechón de Santiago, llevando la alegría y el color del Caribe a las calles de la capital española.
El punto más destacado del desfile fue la carroza oficial dominicana, una estructura de nueve metros de altura adornada con luces y palmeras, donde el Ballet Dominicano en Europa ejecutó coreografías de merengue y bachata con trajes que fusionaban lo tradicional y lo moderno. La carroza, que simbolizaba la riqueza cultural y natural del país, también incluyó representaciones artísticas como las Muñecas Sin Rostro y las Olas Monumentales, que evocaban el mar Caribe, reforzando la conexión entre la diáspora y su tierra natal.
El evento también tuvo un componente emotivo, con un homenaje a dos figuras clave de la cultura dominicana: Daniel Tejeda, nombrado Rey de Honor, y la activista Bernarda Jiménez (In Memoriam), representada por su hija como Reina de Honor. El embajador dominicano en España, Tony Raful, destacó que esta participación refleja los fuertes lazos entre ambos países y la vitalidad de la comunidad dominicana en el extranjero. «Este desfile es una celebración de nuestra identidad, un recordatorio de que, dondequiera que estemos, llevamos a República Dominicana en el corazón», declaró Raful.
Héctor Farías, director del Carnaval Dominicano en Madrid, celebró el impacto del desfile y anunció planes para la primera Parada Dominicana Madrid en 2026, un evento que buscará consolidar la presencia cultural dominicana en Europa. «Queremos que Madrid sea un espacio donde nuestra diáspora pueda celebrar su herencia y compartirla con el mundo», afirmó Farías, quien lideró la organización del evento con el apoyo de la Embajada Dominicana, el Consulado General y el INDEX España. La participación dominicana en la cabalgata no solo fue un éxito visual, sino también una demostración de unidad y orgullo nacional, reafirmando el compromiso de la comunidad dominicana en Europa con la promoción de su identidad cultural.
Este desfile no solo deslumbró a los espectadores, sino que también reafirmó el lugar de la República Dominicana como un referente cultural en el extranjero, llevando su música, baile y tradiciones a uno de los escenarios más importantes del mundo. Fue una celebración de la identidad dominicana, donde cada elemento —desde las comparsas hasta la música— transmitió la riqueza y diversidad de una cultura que sigue viva más allá de sus fronteras.