Por: Rafael Santos
China acelera su automatización industrial y supera a potencias como Alemania y Japón
El número de robots en la industria de un país es un claro indicador de su nivel de automatización y desarrollo económico. En 2022, China registraba 402 robots por cada 10,000 empleados, una cifra que en 2023 se elevó hasta los 470, consolidando su posición como líder en automatización industrial a nivel global. Este incremento, además de situarla en la tercera posición mundial, evidencia la rápida evolución del país en el sector. Solo Corea del Sur, con 1,012 robots, y Singapur, con 770, se mantienen por delante en esta carrera tecnológica.
Mientras tanto, economías tradicionalmente avanzadas en este ámbito, como Alemania y Japón, quedaron relegadas al cuarto y quinto puesto, con 429 y 419 robots por cada 10,000 empleados, respectivamente. La diferencia con China no solo subraya la velocidad con la que la nación asiática está modernizando su industria, sino que también pone en perspectiva la ambición de sus estrategias a largo plazo.
El plan de Xi Jinping: una visión para el futuro industrial
El ascenso de China en esta clasificación no es casualidad. Es el resultado directo de un plan estratégico diseñado por el gobierno de Xi Jinping para transformar su economía industrial y posicionarse como un competidor directo frente a las potencias tecnológicas más avanzadas del mundo, como Estados Unidos, Corea del Sur y Singapur. Este esfuerzo forma parte de un esquema más amplio para modernizar su economía y garantizar la competitividad global.
En 2019, China ingresó por primera vez al top 10 de los países con mayor densidad de robots. Tan solo cinco años después, ya ocupa el tercer lugar, dejando atrás a economías tan relevantes como la de Estados Unidos. En 2023, Estados Unidos registró 295 robots por cada 10,000 empleados, situándose en la undécima posición, lejos del ritmo de avance chino. Este contraste refuerza la narrativa de que la nación asiática está marcando un camino acelerado en la automatización industrial.
Duplicar la densidad de robots: el objetivo para 2025
En 2021, el gobierno chino presentó un ambicioso plan de desarrollo para la industria robótica. Este proyecto busca aumentar las ventas de robots en al menos un 20% anual y fomentar la creación de empresas especializadas que contribuyan a duplicar la densidad de robots para 2025.
Aunque China cuenta con una fuerza laboral de 37 millones de personas dedicadas a la manufactura, su apuesta no responde a una escasez de mano de obra. Más bien, refleja una visión orientada a competir directamente con las economías más avanzadas del planeta, tanto en capacidad tecnológica como en eficiencia industrial.
Impacto global y proyecciones futuras
El avance de China en este sector no solo transforma su propia economía, sino que también redefine el panorama global de la automatización. Países tradicionalmente líderes en tecnología industrial se enfrentan ahora al reto de mantener su ventaja competitiva frente al gigante asiático. Corea del Sur y Singapur, aunque aún mantienen una clara distancia, podrían verse alcanzados si China mantiene su ritmo de crecimiento.
Por otro lado, la automatización también genera debates sobre el impacto en los empleos tradicionales, tanto en China como en el resto del mundo. Sin embargo, para el gobierno de Xi Jinping, este sacrificio es necesario para asegurar el liderazgo económico y tecnológico del país en las próximas décadas.
China no solo está demostrando que puede alcanzar a las grandes potencias tecnológicas, sino que, con su rápido avance en automatización industrial, está trazando el camino hacia una nueva era de competitividad global.
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