La reciente situación de conflicto en Medio Oriente y la creciente inestabilidad global han llevado al Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York (NYPD) a implementar nuevos criterios de seguridad para la edición 2024 del Maratón de NYC, uno de los eventos más destacados a nivel mundial que se celebra en la Gran Manzana.
Rebecca Weiner, subcomisionada de contraterrorismo de la NYPD, confirmó esta semana que habrá un aumento en la presencia de oficiales encubiertos a lo largo de la ruta del maratón, en el cual se anticipa la participación de 50,000 corredores de 150 países. “Este año, contaremos con una sólida cobertura antiterrorista. Verán equipos de armas pesadas, así como nuestra unidad canina K9”, afirmó Weiner, resaltando que el contexto de seguridad en 2023 fue complejo, y que este año podría ser aún más desafiante.
Se recordó a los conductores sobre los significativos bloqueos de calles y a los transeúntes que podrían ser sometidos a inspecciones de seguridad, especialmente aquellos que intenten acceder a la ruta del maratón como espectadores, llevando mochilas o bolsas. La presencia policial se reforzará en tierra, mar y aire, con agentes distribuidos en cada esquina de la ruta.
En una variación de la tradición, este año no se permitirá a los ciclistas recorrer la ruta del maratón, una práctica que se había llevado a cabo durante más de 20 años. La decisión se debe a un incidente el año pasado, donde un ciclista atropelló a un peatón en la ruta. Además, el uso de drones o dispositivos aéreos no tripulados en los alrededores del evento sigue siendo estrictamente prohibido, con severas consecuencias legales para quienes ignoren esta restricción.
El jefe de Patrullas del NYPD, John Chell, enfatizó que “una enorme presencia de uniformados y de todas nuestras brigadas estará desplegada este fin de semana. Hasta ahora, no hay amenazas creíbles que puedan comprometer la seguridad del evento. Sin embargo, recordamos a los neoyorquinos y visitantes que, si ven algo, deben decir algo”.
Este viernes, se registró una falsa alarma tras el hallazgo de un dispositivo sospechoso en Central Park, cerca de la línea de meta del maratón, que resultó no ser peligroso. El escuadrón antibombas determinó que el objeto, que tenía forma de granada, no representaba una amenaza, aunque las autoridades continúan investigando su origen y si fue dejado intencionalmente en el parque.
El maratón del año pasado se llevó a cabo poco más de un mes después del ataque terrorista de Hamás contra Israel el 7 de octubre, lo que llevó a una revisión exhaustiva de las medidas de seguridad por parte de las autoridades.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com