Kanye West enfrenta una nueva demanda por agresión sexual presentada por su exasistente, Lauren Pisciotta, quien lo acusa de drogarla y abusar de ella durante una sesión de estudio con Sean ‘Diddy’ Combs. Según la denuncia presentada el 8 de octubre en el Tribunal Superior de Los Ángeles, Pisciotta asegura que la agresión ocurrió en una sesión en Santa Mónica, California, donde West ordenó que le sirvieran una bebida adulterada antes de cometer el acto. La demandante sostiene que, tras el incidente, el rapero confesó que “tuvieron una pequeña relación una vez”, en referencia a esa noche.
Esta no es la primera vez que Pisciotta lleva a West a los tribunales. Previamente, la exasistente lo demandó por incumplimiento de contrato, acoso sexual, despido injustificado y ambiente de trabajo hostil. En esa ocasión, el equipo legal de Kanye West negó rotundamente las acusaciones, alegando que Pisciotta había intentado acosarlo sexualmente para obtener beneficios laborales y financieros. Según sus abogados, tras ser rechazada, ella intentó chantajearlo.
West, a través de sus representantes legales, emitió un comunicado refutando las acusaciones, afirmando que Pisciotta había robado su teléfono celular para eliminar evidencia que desmentiría sus afirmaciones. Además, aseguraron que fue despedida por incompetencia y por exigir sumas de dinero injustificadas. Kanye también alegó que Pisciotta, en un incidente separado, le ofreció sexo en su cumpleaños, lo cual él rechazó, y afirmó que ella le envió imágenes explícitas sin ser solicitadas.
Esta nueva demanda añade más polémica al historial de Kanye West, quien ha enfrentado numerosas controversias tanto en su vida profesional como personal. Pisciotta busca justicia tras los supuestos abusos, mientras que el rapero se prepara para presentar una contrademanda en respuesta a estas acusaciones. El caso está en curso y aún no se ha fijado una fecha para el juicio.
Por: Rafael Santos