La senadora Kirsten Gillibrand y la congresista Yvette D. Clarke reintrodujeron en la Legislatura federal una iniciativa que busca cambiar la métrica del índice de promedio de ingresos y destinar $15,000 millones en programas de vivienda, justo cuando reportes revelan que más del 50% de las familias de la Gran Manzana no ganan lo suficiente para costear sus arriendos.
Más del 50% de las familias neoyorquinas batallan mes a mes para poder pagar los elevados costos de las rentas de sus apartamentos, un dolor de cabeza que en vecindarios de mayor afluencia de minorías, como la comunidad latina, se siente directo a la yugular. La queja es clara y directa: ante la falta de suficientes unidades de vivienda asequible, los costos en los arriendos están cada vez más caros y miles de inquilinos no ganan lo suficiente para poder pagar. En condados como El Bronx, más del 65% de los inquilinos se ven ahorcados para poder cubrir sus alquileres, según dejó ver un reciente informe de United Way of New York y Fund for the City of New York.
Y como una manera de ayudar a inquilinos a alivianar un poco los gastos en rentas y poder acceder a unidades asequibles, la senadora Kirsten Gillibrand y la congresista Yvette D. Clarke están impulsando una iniciativa de ley en las cámaras legislativas federales, que entre otros puntos, busca revisar el llamado Ingreso Medio del Área (AMI), una métrica utilizada por el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD) para determinar los precios de los alquileres y los límites de ingresos para que arrendatarios puedan aplicar a apartamentos a bajo costo.
Así lo manifestaron este lunes las legisladoras neoyorquinas, tras anunciar la reintroducción de la llamada Ley de vivienda asequible y equidad de ingresos medios del área. Las representantes de Nueva York al Senado y la Cámara destacaron que la medida actual ha sido “particularmente perjudicial” en medio de la crisis de falta de apartamentos asequibles, ya que excluyen a las familias de bajos ingresos de las viviendas asequibles destinadas para ellas.
“La crisis de vivienda asequible hoy está realmente fuera de control. Estamos viendo que los más vulnerables de nuestras comunidades siguen sin poder comprar sus casas y apartamentos al mismo tiempo que las tasas de desocupación en toda la ciudad están en mínimos históricos, especialmente las unidades asequibles”, dijo la senadora Gillibrand. “La Ley de Vivienda Asequible y Equidad de Ingreso Medio del Área reexaminaría nuestro enfoque para calcular el AMI e invertiría $15 mil millones anualmente para ayudar a que las viviendas sean más asequibles para las familias de bajos ingresos y clase media en Nueva York”.
La legisladora agregó que “ningún trabajador debería estar quebrado simplemente por intentar vivir en un hogar seguro y accesible” y mencionó que urgen medidas para brindar la mano a familias de bajos ingresos y de clase media para encontrar opciones de vivienda “razonables”.
La congresista Clarke, por su parte, destacó que con los actuales cálculos del promedio de ingresos nadie se ve más afectado que las comunidades de color, y advirtió que de aprobarse la pieza de ley, no solo se beneficiarían las comunidades vulnerables de Nueva York, como la latina, sino todas las más afectadas a nivel nacional. Asimismo advirtió que los arriendos por las nubes han hecho que miles de familias trabajadoras tengan que sumarse al éxodo de neoyorquinos que no tienen más remedio que abandonar la Gran Manzana.
“Los crecientes precios de los alquileres y una grave escasez de unidades de vivienda asequibles están desplazando a las comunidades de bajos ingresos en todo el país, incluido mi condado natal de Brooklyn. Esto hace que la vivienda básica sea inalcanzable para quienes más la necesitan”, dijo la congresista, haciendo énfasis en que su condado, donde se estima que una familia pequeña requiere $5,408 mensuales para subsistir, miles sufren el peso de las rentas elevadas.
“En Brooklyn, encontrar viviendas asequibles es extremadamente difícil. Cuando las unidades están disponibles, a menudo se dirigen a los solicitantes con las solicitudes más sólidas, no necesariamente a las familias más necesitadas“, señaló la política, insistiendo en que la legislación que está impulsando, ayudará a combatir la crisis.
“Esta legislación aborda cómo el Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD) calcula el ingreso medio del área (AMI), una estadística que determina los límites de ingresos y los niveles de alquiler para viviendas asequibles. Confío en nuestra capacidad para lograr cambios muy necesarios, de modo que podamos garantizar que todas las personas tengan acceso a este derecho fundamental, porque la vivienda es un derecho de todos“.
Las promotoras de la pieza legislativa destacaron que actualmente, la métrica AMI se basa en datos de ingresos de toda el área metropolitana, utilizando datos de las áreas más ricas de Westchester y el condado de Rockland para determinar quién califica para viviendas en comunidades de bajos ingresos en toda la ciudad de Nueva York.
La senadora Kirsten Gillibrand y la congresista Yvette D. Clarke reintrodujeron una iniciativa para aliviar la crisis de vivienda.
“Este proyecto de ley adopta un enfoque múltiple para abordar algunos de los principales desafíos que han llevado a una grave falta de viviendas asequibles en las áreas urbanas de nuestra nación. Crearía más de 350,000 nuevas unidades de vivienda asequible con una inversión anual de $15,000 millones y ordena a HUD que evalúe métodos de cálculo alternativos para que AMI incluya mejor a las familias elegibles de bajos ingresos en las determinaciones de vivienda asequible“, agregó Clarke.
La presidenta del Comité de Vivienda de la Asamblea estatal, Linda Rosenthal, manifestó su apoyo a la iniciativa y dijo con preocupación que actualmente 1 de cada 3 neoyorquinos gasta por lo menos la mitad de sus ingresos mensuales en el pago de alquiler de apartamentos, lo que evidencia la creciente crisis de vivienda asequible, al tiempo que los salarios no presentan incrementos.
“Los alquileres están aumentando en todo el país, pero los salarios se han mantenido estancados, dejando a las personas con menos opciones de vivienda que nunca. Reexaminar el cálculo de la métrica del ingreso medio del área, en la que se basa para determinar la elegibilidad para viviendas asequibles, haría que las viviendas asequibles fueran más accesibles para aquellos con mayor necesidad”, dijo la líder estatal. “La Ley de Vivienda Asequible y Equidad de Ingreso Medio del Área también haría una inversión de $15 mil millones en programas vitales que estimularán la creación de viviendas asequibles en comunidades de todo el estado”.
El senador estatal Brian Kavanagh, presidente del Comité de Vivienda del Senado de Nueva York, recalcó que para que la Gran Manzana salga de la crisis de vivienda asequible, además de los esfuerzos que realice el Estado, es decisivo que el gobierno federal haga su parte a fin de combatir la inestabilidad de la vivienda y el desamparo.
“Necesitamos que el gobierno en todos los niveles trabaje en colaboración en estos enormes desafíos”, dijo el legislador, quien calificó la iniciativa de las políticas neoyorquinas como “muy ambiciosa”, ya que aumentaría “drásticamente los fondos federales” para la producción de viviendas asequibles y garantizar que las viviendas que se levanten sean realmente asequibles. “Haré todo lo que pueda para apoyar los esfuerzos del senador Gillibrand y del representante Clarke para lograr la aprobación de esta importante legislación, conseguir que se asignen estos recursos y, finalmente, garantizar que todos los neoyorquinos tengan la oportunidad de vivir en un lugar seguro, asequible y de alta calidad. vivienda accesible”.
Más del 50% de las familias neoyorquinas no ganan suficiente para pagar sus rentas.
Otros líderes políticos de otros estados, como la representante Rashida Tlaib, de Michigan, han manifestado desde ya su apoyo al paquete legislativo impulsado por las legisladoras neoyorquinas, y destacó que a pesar de los esfuerzos que las localidades hacen para generar más viviendas asequibles, hacer cambios en las métricas AMI podrá ayudar a inquilinos de ingresos bajos y medios que actualmente están siendo excluídos de los programas de acceso a apartamentos asequibles.
“La forma en que se calcula el ingreso medio del área (AMI) es fundamental para que nuestro gobierno federal garantice el acceso a viviendas asequibles. Es por eso que tantos defensores de la vivienda asequible están pidiendo cambios en una fórmula AMI que está frenando a nuestras comunidades más vulnerables al agruparlas con comunidades más ricas y sesgar hacia arriba las métricas de asequibilidad”, dijo la congresista. “La Ley de Vivienda Asequible y Equidad de Ingreso Medio del Área ayuda a abordar la necesidad urgente de desarrollar más viviendas verdaderamente asequibles al promover más medidas AMI locales que nos permitirán adaptar nuestras políticas de vivienda asequible a nuestras diversas comunidades”.
Datos
50% de las familias de la Gran Manzana no ganan lo suficiente para costear sus arriendos
65% de los inquilinos de El Bronx se ven ahorcados para costear sus rentas, ubicando a ese condado como el más preocupante
33% y más de los hogares de la ciudad de Nueva York gastan al menos la mitad de sus ingresos en alquiler
50% de los hogares no pueden pagar las necesidades básicas
50% gastan al menos la mitad de sus ingresos en alquiler
La ley impulsada ordenaría al Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano que evalúe métodos de cálculo alternativos para el AMI
Exigiría a HUD que evalúe los impactos que los condados de Westchester y Rockland tienen en las métricas relacionadas con el AMI en la Gran Manzana y la oferta de viviendas asequibles de la ciudad de Nueva York, incluidos los límites de ingresos y los precios máximos de alquiler
Por Edwin Martínez