La comunidad dominicana en Nueva York está de luto tras el asesinato de Pamela Almonte Cabrera, una mujer de 35 años que fue apuñalada cinco veces en el pecho la madrugada del domingo frente al Mama Dora Bar and Lounge en El Bronx. El trágico incidente ocurrió alrededor de las 4:00 a.m. y ha conmocionado a familiares, amigos y vecinos.
El crimen que sacudió a la comunidad
Cabrera fue trasladada inicialmente al BronxCare Health Systems y luego al Hospital Lincoln, donde perdió la vida a causa de las heridas. Según informes policiales, la víctima había estado involucrada en una discusión dentro del bar que terminó en violencia.
Un video de vigilancia mostró a Cabrera, apoyada por otra persona, sentándose en la acera antes de desmayarse. Las autoridades continúan investigando el caso, aunque aún no hay detenidos.
Una familia en duelo
Wendy, una amiga cercana de 52 años, recordó que había visto a Cabrera solo dos horas antes del incidente. «Ella estaba feliz, muy feliz. Todo el día, todos los días, estaba feliz», dijo con dolor. Wendy también destacó que Cabrera deja tres hijos: dos en República Dominicana y una hija de 17 años en Nueva York.
«Nos sentimos muy mal porque era una buena persona que dejó tres hijos en la orfandad», expresó Wendy, quien también mencionó que el hermano de Cabrera, que vive en Filadelfia, quedó destruido por la noticia. «El hermano lloró mucho. Tuvieron que ponerle una inyección para ayudarlo a dormir», contó.
Una mujer trabajadora y alegre
Pamela Almonte Cabrera trabajaba como técnica de uñas y era conocida por su carácter amigable y su sonrisa constante. Su muerte ha generado una ola de indignación en la comunidad dominicana de Nueva York, que exige justicia y seguridad para evitar más tragedias como esta.
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